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Escuela de Padres

Ansiedad en niños con papás y mamás separados

   ¿Cómo definiremos la ansiedad? Como una reacción (respuesta) emocional que acontece ante una situación percibida como amenazante. ¿Presentan los niños de padres separados ansiedad? La respuesta es Sí. En un estudio (Morgado y González, 2001)  se encontró que en niños de 8 a 12 años los niveles de ansiedad eran mayores si los padres estaban separados.

    Wegman (1986) encontró que cuando los papás se separan, los niños pueden presentar dolor, confusión, odio, angustia, amargura, sentimiento de fracaso y duda de sí mismos. Además de temor ante el futuro, se creen culpables y pueden mostrarse irritables, solitarios, tristes, etc. De ahí la importancia de NUNCA hacer algo que pueda producir que el niño se sienta rechazado en alguna manera por parte de sus padres.

    ¿Afecta a la escuela? Pues todo parece que sí; al parecer, los hijos de padres separados presentan menor rendimiento escolar, les gusta menos la escuela y suelen tener más problemas con sus compañeros. ¿Qué desórdenes pueden aparecer por ansiedad? Los principales son fobia a la escuela, desorden afectivo e incluso depresión en niños.

    Existe un tipo de trastorno que pueden presentar los niños de padre separados que es el Trastorno de Ansiedad por Separación. Este trastorno se caracteriza por la presencia de ansiedad excesiva ante la separación de las figuras de apego, o ante la anticipación de estas situaciones. Entre los síntomas que suelen aparecer, nos encontramos con malestar excesivo, quejas somáticas, preocupación persistente y negativa a permanecer o dormir solos.

    ¿Qué consejos existen para los papás y mamás que se van a separar?

  • Es importante preparar a los niños y niñas para la separación
  • No hay que descuidar la necesidad de información, atención y afecto durante este período de transición.
  • No olvidar que los niños pueden presentar tristeza, cólera, angustia y sentimiento de culpa.
  • Los niños tendrán, en ocasiones, deseo de reconciliación de los padres durante mucho tiempo.
  • Puede observarse una regresión en el desarrollo de los niños ante la separación. En la mayoría de los casos es temporal y perfectamente normal.
  • El mejor medio de adaptación es el amor y la presencia de los padres en la vida del niño..
  • Siempre escuchar a los niños.
  • NUNCA usar al niño como mensajero y confidente. 



¿Cómo modifico la conducta de mi hijo?

Bien, hay muchos métodos en psicología para modificar la conducta de los niños en varias direcciones. Se pueden mejorar conductas ya existentes, se pueden adquirir nuevas conductas, se pueden eliminar conductas y se pueden controlar conductas. En función de lo que busquemos, podremos usar una u otra fórmula:

Mejorar conductas: Refuerzo Positivo o Refuerzo Negativo. 
  • Hablamos de positivo cuando relacionamos conductas positivas con consecuencias positivas. Por ejemplo, un premio por portarse bien. 
  • Y hablamos de negativo cuando eliminamos algo desagradable si el niño hace algo positivo. Por ejemplo, le levantamos un castigo si se porta bien.



Adquirir nuevas conductas:
  • Moldeado: Ir reforzando, de manera selectiva, las conductas preferidas del niño. Primero el refuerzo ha de ser muy frecuente, y luego más y más espaciado en el tiempo.
  • Modelado: Presentar una persona modelo para que el niño copie la conducta deseable. Es lo que se consigue con algunos dibujos animados o programas de televisión cuando el personaje hace cosas buenas.
  • Encadenamiento: Formar conductas complejas uniendo otras que son sencillas (muy usado en actividades de la vida diaria).

Eliminar conductas
  • Sanción: Se retira algo positivo si el niño hace algo no deseado.
  • Castigo positivo: Aparece un elemento no deseado cuando el niño hace algo no conveniente (muy utilizado con conductas agresivas o autolesivas). 
  • Extinción: Reducir una conducta ingnorándola justo en el instante que se produce (sobre todo cuando se hace por búsqueda de atención).
  • Refuerzo de conductas incompatibles: Se recompensa tanto la conducta deseada, que aumenta la frecuencia de ésta y no deja tiempo para que aparezca la conducta no deseada.
  • Sobre-corrección: Repetir una y otra vez una conducta deseada para corregir los efectos provocados por una conducta inadecuada.
  • Tiempo fuera: se impide el acceso si se ha realizado una conducta no adecuada. Por ejemplo, cuando un niño sale al pasillo en el colegio si no deja de hablar. 
Control de conductas
  • Economía de Fichas: Junto a unos requisitos previos, se elabora un sistema de puntos o fichas en las que el niño puede comprobar el avance de su buen comportamiento. Por ejemplo, se le pone un positivo (+) cada vez que hace cosas buenas durante un día.
  • Contrato de conductas: se realiza un documento (contrato) donde el niño ve las situaciones no adecuadas y las sí adecuadas, y las consecuencias de cada una.